Industria del delito

En este libro están grabadas las imágenes de esta industria del delito. Saberes y prácticas que fueron construyendo la inquietante asociación entre peligrosidad y pobreza, que perdura hasta la actualidad. Al parecer el delito es patrimonio de un grupo social determinado. Ahí recae el triunfo de la criminología oficial, en la creación de la frontera política y social entre un nosotros (gente “decente” o común) y los otros (pobres, marginales, ladrones, conflictivos), división que ha justificado políticas de seguridad propuestas por el Estado liberal y el neoliberal.